Fue instituido por el papa Francisco mediante el motu proprio Sedula mater, del 15 de agosto de 2016, uniendo en este nuevo dicasterio las tareas y funciones que tenían encomendados el Consejo Pontificio para los Laicos, y el Consejo Pontificio para la Familia.
La constitución apostólica Praedicate evangelium en su reforma de la curia romana, mantiene ese dicasterio estableciendo sus contenidos y funcionamiento.
[4] Mediante el motu proprio Sedula mater, del 15 de agosto de 2016, el papa Francisco erigió en la curia romana el Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida, uniendo en esta nueva institución curial las tareas que venían realizando los Consejos Pontificios para los Laicos y para la Familia.
Excepto el prefecto, que será un cardenal, todos los demás miembros pueden ser clérigos o laicos, y elegidos entre los diversos campos de actividad, casados o solteros, y de las diversas partes del mundo.
[6] En su funcionamiento del Dicasterio se divide en tres secciones, una para los Laicos, otra para la Familia, y una última para la Vida.