Diego Serrano de Sotomayor

Además, durante su carrera eclesiástica fue redentor, definidor y calificador del Santo Oficio.

Sin embargo Diego Serrano no llegaría a la diócesis granadina hasta el mes de septiembre, muriendo tan sólo un mes después.

Según cuenta Pedro Suárez, el obispo Serrano fue enterrado en el Convento de la Merced de Granada, donde había profesado como fraile; siendo inhumado en una sala contigua a la sacristía, antes de entrar a la claustro, en un sepulcro elevado sobre el suelo donde se inscribía el siguiente epitafio:En V.P.

Didacum Serrano, huius Illiberitani Coenobii filium, post totius Redemptricis familiae Deiparae de Mercede Generalem amplisimum, de hinc Solsonensis, Segobricensisque Ecclesiae misericordiosisimum Antisitem; demum Accitanum, et Bastetanem emeritisimum Episcopum, qui in eadem Acci vitam Deo Numini reddidit anno Domini 1652, die 5, Octobris, Etatis vero 74.

Ipsius corpus in hanc Regalem domum eius issutraslatum sub isto lapide rquiescit.