El primer discurso fue corto y generalizado, el segundo abarca la problemática central del proceso cultural latinoamericano y sobre la función que le confiere Neruda a la literatura en este proceso.
No está signado por un destino cabalístico superior al de quienes ejercen otros menesteres y oficios.
Él cumple su majestuosa y humilde faena de amasar, meter al horno, dorar y entregar el pan de cada día, con una obligación comunitaria"(...).
{{ ↑ Schidlowsky, David: "Pablo Neruda y su tiempo", RIL editores, Santiago de Chile 2008, Tomo II, pág.
41-43}} {{ ↑ discurso de Estocolmo, Alpignano, Italia, A. Tallone, 1972}}