No se ordenó, sin embargo, reponer el pavimento original.
Los pilares proceden de cantera y fueron tallados, en tanto que la tabla superior es una roca natural.
La figura masculina presenta el cuerpo en actitud de movimiento, representado por su tensión en las piernas y su pie izquierdo levantado por la zona posterior del talón, apoyando todo su peso sobre el pie derecho, que se muestra seccionado en tres fragmentos; junto a él, otro fragmento de dedo suelto.
En la parte posterior se diseña una cadena de pequeñas bolas semejando una columna vertebral.
La cabeza de la escultura está también horadada en la zona del rostro y muestra una leve cabellera movida por el viento.
La figura descansa sobre una peana de bronce unida a ella, en cuyo frente y en el centro se localiza la firma del autor «Dalí», en relieve, y en el extremo izquierdo un pequeño sello con la marca «CAPA», del taller de fundición Eduardo Capa.
Este taller de fundición fue el encargado de ejecutar la obra, llevando a cabo un primer modelo sobre el cual Dalí efectuó las modificaciones oportunas.
La escultura se asienta sobre un pedestal de granito negro pulido.