Los datos completos de la filiación de Acassuso quedaron guardados en un pergamino que conserva esta revista, realizada ese mismo día:[2] En el español actual, esto podría entenderse como: Este documento, es considerado el primer testimonio referente a Acassuso en Buenos Aires, proporciona su aspecto físico y revela que era un soldado, no un capitán como dice la versión de algunos historiadores.
Acassuso logró capturar a los contrabandistas con sus mercaderías, principalmente géneros, los cuales tenían un alto valor en la época, y obtuvo su ascenso a capitán, además de un resarcimiento económico.
Cuando despertó, motivado por el extraño sueño, aceptó cumplir la petición del santo cuando su situación económica se lo permitiera.
[2] Poco tiempo después, Acassuso dejó la milicia para dedicarse al comercio, instalando así una casa de negocios a metros de la Plaza Mayor (actual calle San Martín, entre Rivadavia y Bartolomé Mitre, frente a la Catedral Metropolitana).
Además, abarcaba el rubro del tráfico de esclavos y el contrabando, que eran bastante comunes en esa época.
Acassuso poseía en ese entonces una propiedad en la esquina que actualmente es Moreno y Chacabuco, otra en la que hoy es la calle Bolívar, casi México, y otra en El Retiro, cerca del Real Asiento de los Ingleses, destinada al tráfico de esclavos.
Esta iglesia se encontraba en las actuales calles Cerrito, Lavalle, Pellegrini y Corrientes.