Originalmente la especie se encontraba distribuida a lo largo de toda la isla, cubierta casi completamente por bosques.
En la actualidad su distribución está limitada básicamente a los bosques entre 200 y 1500 m sobre el nivel del mar.
Aun así sigue siendo un ave extremadamente rara, aunque los esfuerzos de conservación parecen haber evitado por el momento su extinción.
Probablemente nunca fue un ave común pero la degradación de su hábitat y la caza excesiva han reducido considerablemente su número.
Sin embargo, la mayoría de los investigadores piensan que las formas extintas eran probablemente especies distintas del género Dúcula.