Ecuación de estado de los factores formadores del suelo

De allí surgen las secuencias: Climo-secuencia (clima), bio-secuencia (organismos), topo-secuencia (relieve), lito-secuencia (material parental) y crono-secuencia (tiempo).

[4]​ Así, los suelos son el resultado de la interacción dinámica entre litosfera, atmósfera, hidrosfera y biosfera, que en conjunto integran la pedosfera.

En los sistemas de clasificación globales (Soil Taxonomy, Word Reference Base) se han hecho pocos esfuerzos para vincular los procesos formadores con los taxones del suelo.

[7]​ Se observan ventajas en la exaltación de los procesos ya que los mismos pueden ser útiles como marco para explicar la clasificación del suelo, mostrando la relación genética entre horizontes diagnósticos y taxones.

Entre los procesos pedogenéticos que pueden ser vinculados a las especificaciones requeridas para los materiales, propiedades y horizontes diagnósticos de los principales sistemas taxonómicos globales se pueden mencionar: la iluviación, eluviación, el enriquecimiento con cationes básicos, la andisolización, la paludización, gleización, melanización, la ferralitización o laterización, la podzolización, la decalcificación, la haploidización, cryoturbación, salinización, calcificación (acumulación de calcio secundario), alcalinización, silicificación, la antrosolización (acción del hombre), la cumulización o paquización, salinización, acumulación de litter o litterización, leucinización, humificación, ferruginación (rubefacción, braunificación) y mineralización.