Fue diseñado por el arquitecto Alberto Manrique Martín en 1926 y en su momento fue el más alto de la ciudad.
El edificio se construyó a orillas del río San Francisco, que aún no había sido canalizado y fluía bajo el actual Eje Ambiental.
[1] En su inicios el inmueble se encontraba en el costado suroccidental del puente Cundinamarca,[2] situado en la carrera Octava entre calles Catorce y Quince.
En efecto, en la entrada por la carrera Octava se encuentra una escultura en altorrelieve con el escudo de esa institución.
El último piso se agregó posteriormente y no corresponde al estilo del resto de la estructura, que deforma.