Eduardo Escobar (escritor)

Tras pasar por diversos planteles religiosos, siendo todavía un adolescente, se retiró de los estudios formales para dedicarse muy temprano a la lectura y al proyecto nadaísta.

Entre sus libros se destacan Invención de la uva (1966), Del embrión a la embriaguez (1969), Cuac (1970), Confesión mínima (1975), Correspondencia violada (1980), Nadaísmo crónico y demás epidemias (1991), Ensayos e intentos (2001), Fuga canónica (2002), Prosa incompleta (2003), Poemas ilustrados (2007), Cuando nada concuerda (2013), Cabos sueltos (2017), Insistencia en el error (2020), y Escritos en contravía (2023), entre otros.

Colaborador de Nadaísmo 70, publicación dirigida por Gonzalo Arango y Jaime Jaramillo Escobar.

Colaborador habitual en las revistas SoHo, Credencial, Cromos, Universidad de Antioquia y Aleph.

Además dirigió Nadaísmo ventiao, para Colombiana de Televisión, una serie en la cual se repasó la biografía de grandes íconos culturales del siglo XX como Carlos Gardel y Charles Chaplin, entre otros.

[1]​ Su pensamiento y su escritura se han formado y modelado con la lectura de los mejores clásicos: Montaigne, Voltaire, Fernando González, Shakespeare, Cervantes, Durrell, Baudelaire, Russell, Valéry, Rimbaud, André Breton, Beckett, Celine, Bernhard, Sartre, Camus, Nabokov, León de Greiff, Dostoievsky, Tolstoi, y Verlaine, entre otros.

[6]​ Fuga canónica (2002) es una novela biográfica de muy importante valor musical, literario e histórico.

A. Poe, Rimbaud, Kafka, Borges, Fernando González, Benedetti, Neruda, Gómez Jattin, Mario Rivero, León de Greiff, entre otros.

Una fiesta verbal, amplia de motivos imaginativos, juegos fónicos, imágenes danzarinas y novedosas asociaciones.

Condensa la poesía más conocida del poeta : “Cucarachas en la cabeza”, “Homenaje a un anticuario muerto”, “La flecha inmóvil”, y “Envío”.

El libro manifiesta su elección estética: lo caracterizan construcciones retóricas juguetonas, malabarismos verbales, sintaxis barroca, arbitrariedad asociativa, frecuente experimentación, escritura de filigrana, y diversos efectos y recursos culteranos.

El libro conduce a repensar muchos temas, entre ellos el valor histórico y literario del nadaísmo2: el movimiento literario y cultural más brillante e influyente en la vida latinoamericana del siglo XX.

Cuando nada concuerda es una obra ensayística influyente e iluminadora, que acerca muchas veces a la carcajada y genera un gran respeto intelectual.

Es un libro festivo: de muy agradable escritura, y abundante humor e ironía.

Coincide con Flaubert, Nabokov y García Márquez en que el único deber de un escritor es escribir bien.

Insistencia en el error (2020) es una selecta antología poética con nuevas iluminaciones y escritura de madurez.

Y ofrece muchos momentos bellos y enigmáticos, de sugestivas asociaciones, como en los poemas "Declaración del espejo", "Identidades", "El insistente desconocido", "Buscador" "Oración", o "La vida privada de mi sombra".

Se pregunta por la insistencia en el error que pudo haber significado la escritura, y la conciencia del poema como vana aproximación, e incluye evocaciones, recuerdos íntimos, admiraciones y convocatorias que manifiesta con sonriente ironía.

Dos trabajos singulares merecen detenimiento: la deliciosa escritura de la revista SoHo, y las muy diversas columnas del periódico El Tiempo por las que recibió el Premio Simón Bolívar, año 2000, y el premio CPB por su libro Escritos en contravía, en diciembre de 2023..