El Moro de Cumpas

Luego Florencio cambió el palomino a su hijo, Pedro Frisby, casado con María Dolores Durán Meza quienes a su vez tuvieron 8 hijos, quien también era ganadero de profesión, por otro semental.

Durante este tiempo el palomino cumplía con su labor como semental, pero al momento de amansarlo, Don «Chanon» Leyva descubrió que el moro tenía aptitudes para ser caballo de carreras.

Se lo llevó a Agua Prieta para entrenarlo y conseguirle carreras.

La carrera fue promovida en los periódicos locales, y en los pueblos vecinos por lo que atrajo gran atención entre los pueblos vecinos, todos querían ver al Moro que cautivó el cariño de multitudes.

El jinete que lo corrió en la icónica carrera, sobre el Moro fue «Chendo» Valenzuela, quien era un vaquero del rancho Tres Nogales, propiedad de la familia Frisby en Cumpas, mientras que Trinidad «Trini» Ramírez, montó al Relámpago.

La fama del caballo llegó al grado de ser constantemente solicitado para exhibiciones y eventos de beneficencias, con el fin de hacerlos más atractivos y recaudar más fondos, tanto en Ciudad Obregón, como Hermosillo, Caborca y Ures donde el cantante Gilberto Valenzuela que ya cantaba el corrido del Moro de Cumpas, lo montó y cantó su corrido montado en él.

Su cuerpo fue depositado en el bajío el Encino del Rancho «Tres Nogales», que actualmente se halla cercano a los 100 metros de la carretera federal 17 Cumpas – Nacozari.

Gilberto Martínez Orcí también montó en competencias a otro descendiente del moro en 2012.

Al término de la carrera Rafael Romero le llamó a Pedro Infante quien era su compadre, para compartirle que su caballo había ganado y le cantaron la canción, mismo que prometió grabarla, pero al mes falleció.

[5]​Después fue cantado por Antonio Aguilar, Chayito Valdez, Vicente Fernández[6]​ Lucha Villa, Diana Pérez y la original Banda Limón, los Huracanes del Norte, entre otros.