Esa historia es la siguiente: Había un campo que tenía varios tipos de plantas.
Entre ellas estaba el alforfón, situada frente al viejo sauce.
Le avisan de que va a pasar el ángel de la tempestad y recomiendan que baje su cabeza, pero el alforfón no les hace caso.
Después de la tormenta las plantas se incorporan y el viejo sauce, al ver al alforfón quemado por un rayo, comienza a llorar.
Los pájaros le preguntan por qué llora y él les cuenta la historia del alforfón.