Sin embargo, cuando se ve envuelto por accidente en un crimen real, encuentra una inesperada oportunidad de hacer realidad sus fantasías.
Esa noche, dos hombres, Sosa (Pablo Cedrón) y Montero (Walter Reyno), llegan buscando a Dietrich, pero se marchan al no encontrarlo.
A través del celular de Dietrich, Espinosa se entera por un hombre llamado Vega sobre un plan para asaltar una fábrica.
Antes de partir hacia el asalto, Espinosa le asegura a Diana que Dietrich no volverá jamás.
Sosa, Montero y Julio parten rumbo a El Edén, mientras que Espinosa se dirige al casino.
Espinosa intenta partir rumbo al Edén para advertir a los demás, pero sufre otra crisis epiléptica.
Al regresar a las cabañas en busca de Diana, se encuentra con que ella ya ha huido.
Espinosa se lleva al perro de Dietrich y, con él, regresa a su vida como taxidermista.
[6] Llegó a ser precandidata al Óscar para Mejor Película Extranjera,[7] y en la actualidad posee una calificación de 89% en el sitio especializado norteamericano Rotten Tomatoes, basada en 45 críticas.