El cuaderno de Nippur

Si bien no había sido escrito a tal fin, fue publicado seis meses después y se transformó inmediatamente en un suceso de ventas que forzó una segunda y tercera edición a pocos días de su lanzamiento.

Al retornar del hospital, decidió no ocultar su dolencia y compartir sus circunstancias en la red.

Las cosas tomaron un rumbo hacia lo peor y no hay mucho más qué hacer salvo esperar.

[7]​ Cuando al fin se produjo su muerte, el 21 de abril, la noticia tuvo gran repercusión en todos los medios del país.

[16]​ Todos los medios coincidieron en señalar que su salto a la celebridad no fue tanto por comunicar su estado y su final, sino por hacerlo manteniendo su estilo característico hasta las últimas consecuencias.

«Siempre echando mano al humor y a la ironía (...) el aliento de la parca respirando en la nuca.

[6]​ «Miles y miles van a recordarla como la mujer que, sin buscarlo (ella prefería vivir, no dejar una enseñanza), enseñó a ver la vida y la muerte de otra manera.

[15]​ Apenas recuperada de la intervención quirúrgica, y ante el pronóstico de una casi segura muerte cercana, Marie se dispuso a volcar en cuaderno todo lo que quería dejarle dicho a su hijo de por entonces dos años: «un libro que escribí (y sigo escribiendo) para que mi hijo me pueda conocer si las cosas salen mal».

[2]​ Escribió a mano y dibujó en él durante los siete meses siguientes, hasta terminarlo pocos días antes de morir, en la habitación 104 del Sanatorio de la Providencia donde pasó internada sus últimas semanas.

[17]​ Una copia del material llegó a Editorial Planeta de Argentina, que decidió publicarlo.

Es un libro escrito para un chico, pero no es un libro infantil (...) "Es un nuevo género: mina que se está muriendo con un hijo de tres años y va a volcar su alma en las páginas para que el nene sepa cómo era ella", improvisa Sebastián».

Le escribe (y dibuja) sobre la quimioterapia “unos súper remedios para sacarse lo malo de adentro”.

Y en unas apostillas para Nippur más grande lo conmina: “Hacé muchas cosas que te gusten.

[20]​ «Todo lo que una mamá desea contarle a su hijo y de pronto, la muerte te apura y te empuja a resumir en un cuaderno lo que querías transmitir durante una vida más larga (...) la magia inunda cada página y la voz de Marie se transforma en la voz de todas las madres».

[23]​ En cuanto al estilo, es una obra íntegramente manuscrita, con textos, figuras y dibujos llenos de color.

Escrito en primera persona con Nippur como destinatario, predomina un tono alegre y divertido (con algunos pasajes de mayor melancolía).

«El contenido llegó a la editorial, donde tras considerarlo "glorioso" se puso en marcha un trabajo prácticamente artesanal para reproducirlo tal cual y preservar al máximo el original, al punto que lo escanearon sin desarmarlo.

Además contiene dos inserts: un sobre con un poema en su interior y un desplegable, copias exactas de los que la autora pegó en las hojas.

[29]​ En la Revista Ñ, suplemento cultural del diario, Diego Marinelli: «Uno de los más particulares y emocionantes best-séllers de la historia de los best-séllers (...) decidió que iba a pasar el tiempo que le restaba en esta tierra haciendo las dos cosas que mejor sabía hacer: dibujar y querer a su hijo.

María (...) le marca sutilmente la cancha para que se convierta en una buena persona, sin solemnidad sino con ternura, dibujos y marcadores de colores (gran mérito editorial es haber reproducido el cuaderno tal cual Marie, que era arquitecta y dibujante, lo realizó) (...) Es conmovedor hasta las lágrimas (...) encierra algo poderosísimo, que difícilmente logren las mejores obras literarias: una identificación universal con ese binomio madre-hijo, ese lazo invisible por el cual una madre cuida y defiende y educa a su hijo ante todo (...) Marie toca una fibra sensible que destila un amor puro y sano, irremplazable y fundamental (...) Las últimas páginas son desgarradoras pero profundamente dulces».

[35]​ Similar recepción recibió en diversas notas televisivas,[36]​[37]​[38]​[39]​[40]​[41]​ radiofónicas[42]​[43]​[44]​[45]​[46]​[47]​ y gráficas[48]​[49]​[50]​ en medios de todo el país.