El diablo y la dama

Él (Richard Bohringer) sale a comprar cigarrillos al Tabac mientras ella, América (Catherine Jourdan), imagina o sueña que viaja a México y baila una pieza de cabaret con un maniquí en forma de diablo.

[4]​ Está filmada en dos secuencias inversamente simétricas: la primera toma es en un cuarto vacío, él sale del baño y entra en la habitación, se recuesta con ella y sale del cuarto.

En la toma final, él sale del Tabac, atraviesa la plaza, entra al hotel, la cámara gira en redondo hacia la habitación, entra al cuarto y ella le dispara.

Debido a la polémica que causó su presentación por un «planteamiento netamente elitista»,[6]​ la película fue retirada de los cines comerciales y fue exhibida en las salas universitarias y de la Cineteca Nacional.

[7]​ Por ello, argumentaron que la falta de sensibilidad de la audiencia hacia la película se debía su poco conocimiento, información y apertura hacia producciones cinematográficas diferentes del estilo mexicano.