La traducción al castellano estuvo a cargo de Flora Casas.
De acuerdo a Trevor Berret, del sitio en línea en inglés The Mookse and the Gripes, «es en "El progreso del amor" donde el característico estilo de Munro —historias extensas, cronología y memoria fragmentadas, cambios continuos en perspectiva— empezó a florecer».
[2] Evaluando el cuento "La esquimal", Betsy Pelz, del mismo sitio, cita una crítica que la escritora Joyce Carol Oates hizo al respecto en The New York Times, donde aseguró que el cuento fue escasamente ejecutado, y que parece más un borrador.
Pelz se muestra de acuerdo con Oates y, respondiendo a un comentario en el que se criticó a Munro por caer en el estereotipo de mostrar a miembros de las Primeras Naciones —los Inuit, por ejemplo, llamados por mucho tiempo por el controvertido término de "esquimales"— con la bebida y relaciones abusivas, agradeció que esté discutiéndose «su lugar en el canon canadiense, dada la cuestión de la apropiación cultural».
[3] El escritor español Eloy Tizón, en una reseña sobre el libro, afirmó que si bien los cuentos poseen la extensión debida, «podrían considerarse, por su estructura y desarrollo complejos, por su elaboración meticulosa, novelas de corta duración, novelas concentradas».