Película en muchas opiniones inclasificable, puede situarse como documental, debido a que su argumento se basa en la absoluta realidad del proceso de creación artística de un cuadro por su autor, el pintor español Antonio López.
El pintor Antonio López hace años plantó en el jardín de su estudio un membrillero.
La película nos muestra el proceso creativo del cuadro, desde ciertos aspectos técnicos hasta las conversaciones que el pintor mantiene con las personas que visitan su estudio, fijándose en las sensaciones y expresiones que el pintor tiene en todo ese proceso.
Al final de la película, Antonio López nos cuenta un sueño.
La película se filmó en 1990 en Madrid, en el estudio real y la casa de Antonio López, ubicada en la colonia Los Rosales de Chamartín.