Cursó sus estudios primarios en esta ciudad, destacándose porque ganó la beca que anualmente se otorgaba al primer alumno de primaria de cada provincia del país para seguir estudios secundarios en el Colegio Nacional Nuestra Señora de Guadalupe en Lima; (que era el primer colegio del Perú).
Desde niño fue seducido por el canto y la música criolla peruana (valses, polkas, etc.) en el seno familiar y por los discos de tango que su padre (marino mercante) solía traerle de sus viajes.
Muchos años más tarde, habiendo culminado una vida de empresario y teniendo a sus hijos encaminados, se acercó al estudio del gran maestro argentino, el músico Domingo Rullo, solicitándole una oportunidad para cantar algún tango acompañado por él en un local con show de tangos llamado "Caminito", en Lima, donde el maestro se presentaba.
El amor por la música y las canciones hizo que Eleazar publique en 1993, tres colecciones de cancioneros con temas que había recopilado desde su juventud, las que se titularon "1,000 Valses Criollos", "1,000 Boleros" y "1,000 Tangos" de todos los tiempos; cada colección se componía de 10 cancioneros con 100 canciones cada uno.
El libro incluye la letra, la partitura melódica (aporte de Domingo Rullo) y la audición de cada tema por los mejores intérpretes criollos, en cinco discos compactos (20 temas en cada uno) que acompañan la publicación.
En esta segunda presentación el discurso principal estuvo a cargo del reconocido intelectual, crítico de literatura, y gramático peruano Doctor Marco Aurelio Denegri, quien hizo un exhaustivo análisis de la obra y su trascendencia.