Elecciones generales de España de agosto de 1872

Fueron las terceras y últimas elecciones convocadas durante el breve reinado de Amadeo I.

Aunque sólo habían transcurrido dos meses desde las anteriores elecciones, el nuevo presidente del Gobierno, Manuel Ruiz Zorrilla consiguió que el rey Amadeo I disolviera las Cortes para dotarse de una mayoría parlamentaria que le permitiera aplicar el programa político de su partido, el Radical.

Asimismo, para desincentivar más la participación, los conservadores (que habían perdido el poder) optaron por el retraimiento.

Los republicanos federales «intransigentes» y los partidarios de la Primera Internacional pidieron directamente la abstención.

Los radicales ganaron de forma aplastante las elecciones, debido al retraimiento de los conservadores, pero también gracias a «la influencia moral del gobierno» (término eufemístico utilizado en la época para referirse al pucherazo).