Sustituyó a Youssouf Saleh Abbas, cuyo gobierno fue acusado de corrupción.
En esta ocasión, Nadingar expresó la frustración del gobierno de Chad con las redadas: "Estamos en una situación en la que tememos que nuestra paciencia pueda tener límites".
En el Ministerio de Defensa, a Nadingar también le preocupaba el mantenimiento de la ley y el orden en las fuerzas armadas, incluidos los elementos descontentos que habrían exigido la destitución del presidente Idriss Deby.
Intentó minimizar la gravedad del incidente, alegando que los soldados no querían despedir al presidente Idriss Déby del poder, sino que simplemente estaban descontentos con la suspensión de su salario.
Debido a un problema de soldados inexistentes que formaban parte de la nómina del ejército debido a la corrupción, la paga se suspendió durante dos meses mientras el gobierno intentaba corregir la nómina.