En 2003 se procedió a su privatización por el procedimiento de concurso-subasta del 100% del capital al que concurrieron 5 consorcios de empresas para su adquisición.
Las condiciones impuestas de venta fueron que el grupo comprador se comprometiera por un periodo de cinco años a permanecer como accionista mayoritario, a mantener los fondos propios del grupo, a mantener la sede social en España y a mantener la plantilla fija (634 personas en 2003), en las actuales condiciones laborales.
Para comprar ENA se presentaron inicialmente 13 grupos que aglutinaban a 21 de compañías.
Finalmente cinco consorcios (integrados por las principales constructoras y concesionarias de autopistas españolas) fueron los que optaron a esta compra.
El consorcio liderado por Sacyr, (50%), Banco Santander (20%), Caixanova (10%), Caixa Galicia (10%), Torreal (5%) y Caja el Monte (5%), se hizo con el 100% del grupo ENA por un valor de 1.586 millones de euros.