Encarnación es un nombre propio ambiguo (tanto de hombre como de mujer) de origen latino en su variante en español.
Procede del latino Incarnatio, de in (dentro) y caro, carnis (carne), por lo que significa «dentro de la carne».
Su uso como nombre proviene del concepto religioso de la encarnación, expresión que en el cristianismo alude a la creencia de que el Verbo Divino tomó carne humana en la persona de Jesucristo.
25 de marzo: Encarnación de Nuestra Señora.