Enigmatita

Fue descubierta en 1865 en Narsaq, Groenlandia (Dinamarca),[1]​ siendo nombrada así del griego aenigma (un enigma) en alusión a su incierta composición química.

Sinónimos poco usados son: aenigmatita, cosyrita y kolbingita.

Es un silicato anhidro de sodio, hierro y titanio.

[2]​ Forma una serie de solución sólida con la wilkinsonita (Na(Fe2+)2Fe3+O[Si3O9]), en la que la sustitución gradual del titanio por hierro va dando los distintos minerales de la serie.

Suele encontrarse asociado a otros minerales como: egirina, augita, riebeckita, arfvedsonita, hedenbergita, fayalita o ilmenita.