[3][4] Su obra dialoga con la de filósofos como Karl-Otto Apel, Gianni Vattimo, Jürgen Habermas, Richard Rorty, Emmanuel Lévinas y Adela Cortina.
Crítico de la modernidad, como era histórica, sus textos apelan a un "nuevo" momento denominado transmodernidad.
Radicado en España, siguió sus estudios filosóficos en la Universidad Complutense de Madrid.
En 1959 presentó su tesis (en la que continuó investigando acerca del bien común) y obtuvo el doctorado.
Esta experiencia determinó su futura reflexión, porque allí tuvo la oportunidad de vivenciar al pobre como excluido.
En 1968 regresó a Mendoza para enseñar ética en la Universidad Nacional de Cuyo.
[10] Ese mismo año se exilió en México, donde publicó su célebre libro Filosofía de la liberación.
Continuó escribiendo en diferentes periódicos y revistas latinoamericanas hasta su fallecimiento.
[11] Este trabajo consiste en versiones editadas de seis conferencias impartidas por Enrique Dussel en 1972.
[12] Su relato se remonta a los orígenes humanos e incluye temas que van desde los sistemas de creencias y cosmovisiones mexicas e incas hasta los orígenes del cristianismo, el Imperio Bizantino y el papel de la iglesia en la conquista española.
Busca la «praxis» del pensamiento al tratar de gestionar la acción desde la reflexión.
En este libro, Dussel busca la deconstrucción y la desestructuración de la historia desde otros paradigmas, para esto, se encuentra con siete límites: el helenocentrismo, el occidentalismo, el eurocentrismo, la periodificación, el secularismo, el colonialismo teórico-mental y el no incluir a la América no anglosajona en la Modernidad.
Pone como ejemplo la palabra democracia, donde según Dussel demos tiene origen egipcio y significa “aldea”.
Sus obras: [1], del que Enrique Dussel, Eduardo Mendieta y Carmen Bohórquez son Editores.