Hebborn creció en tristes condiciones sociales en South Kensington, pero mostró talento para pintar temprano y se le permitió exhibir en el Maldon Art Club a los 15 años.
Posteriormente, Hebborn trabajó para el restaurador George Aczel, donde también se le permitió hacer "mejoras".
Historiadores del arte como John Pope-Hennessy declararon que sus obras eran genuinas, y estas generaron grandes ganancias en las subastas.
El comerciante de arte Colnaghi se refirió a su proveedor Hebborn.
En 1991 se produjo un documental de la BBC: Eric Hebborn: Portrait Of A Master Forger.