Sobre este primer cuerpo se sitúa el segundo, que posee una sola campana con el nombre de la advocación del templo.
Frente a la entrada se localiza otro retablo de frontón triangular, con dos columnas decoradas con frescos del pintor local Antonio Paniagua.
Tras la Guerra Civil, el edificio pasó a propiedad del ayuntamiento y fue utilizado como colegio de niñas, ocupando el actual edificio del centro médico contiguo a la ermita.
En 1978, la capilla fue cedida a la Hermandad de la Cruz de la Calle La Fuente para situar en ella su sede, la cual adquirió la imagen del santo ese mismo año.
Entre 1993 y 1994 se acometió la reforma de la ermita, sustituyendo su antigua fachada por la actual.