En el siglo XVIII se adoptó una variante cuyo uso, según el contexto político de cada tiempo, ha sido controvertido.
A finales del siglo XX, una variante fue propuesta conforme a las recomendaciones de diseño oficiales y difundida por el concejo aunque sin poner final a la polémica ni ser reconocida definitivamente por la administración.
Esta evolución histórica de las armas medievales de Alcanar es por ello conocida como “borbónica”, siendo su uso el centro de controversia en función del contexto político de cada periodo histórico especialmente durante el siglo XX.
Así, durante la Segunda República se difundieron reproducciones únicamente con el emblema de las tres cañas, sin los elementos de la llamada variante “borbónicas” ni la cruz de Malta, que volvieron en cambio a ser difundidos de nuevo durante el régimen franquista.
Por timbre una corona mural de ciudad.»[1] El blasón propuesto fijaba el diseño y colores del escudo pero sin poner final a la polémica al suponer la eliminación de los elementos usados desde el siglo XVIII.