Estas características fueron en su día, antes de la creación de esta escuela, preconizadas por importantes jugadores rusos como Chigorín y Alekhine, que pueden considerarse sus precursores.
Exponentes de esta escuela, además de Botvinnik, son campeones mundiales como Smyslov, Mikhail Tal, Petrosian, Spassky, Karpov, Kasparov y Kramnik y muchos otros grandes maestros de primera fila.
De hecho, Bobby Fischer, el único campeón del mundo occidental dentro del período 1948 a 2013, puede considerarse un alumno "a distancia" de dicha escuela.
Sin embargo, no todo el mundo está de acuerdo en que exista estrictamente una "Escuela soviética", dada la diversidad estilística de los distintos jugadores soviéticos.
Los críticos opinan que la pretendida "escuela" no era más que un invento publicitario para afirmar que los jugadores occidentales y los soviéticos jugaban de forma distinta, siendo el modo soviético superior al "capitalista".