España sin rey

[1]​ Hace referencia y describe la España de 1869, dividida entre las varias facciones de distintos monarquismos y otras tantas de republicanismos.

[2]​ La España rota e incompatible de un periodo que –auguraba Galdós en 1907–, iniciado en 1870, se cerraría en 1919 (que en realidad fue en 1923, con la dictadura de Primo de Rivera).

[3]​[4]​ Una vez más, el escritor alterna la trama folletinesca de la familia del personaje de Santiago Ibero (ya presentados en el remate de la cuarta serie), con diversos retratos de protagonistas históricos; como en este pasaje en el que un «señor enclenque, con vanagloria de cicerone parlamentario» pasa revista a los diputados:

Como ya había hecho en La de los tristes destinos, para cerrar el episodio Galdós construye un diálogo teatral que refuerza al mismo tiempo la intensidad del desenlace literario y su artificiosidad.

[5]​[4]​ (p. 270) DON WIFREDO.- La Justicia Divina me ha burlado, Fernanda, pues creyéndome instrumento de ella, quise matar a un hombre perverso, y he matado a una mujer... a la infernal Antarés, la que induce a los hombres al vicio... FERNANDA.- He sido yo, señor.