Desde 1941 el aeropuerto tuvo su propio apeadero bajo el nombre "Aeródromo" correspondiente a la línea C-4 de Cercanías Valencia de Renfe.
El apeadero carecía de accesibilidad, ya que para llegar a la terminal había que cruzar unos 200 metros de carreteras.
En el año 2004 fue aprobado un acuerdo entre el Ministerio de Fomento y la Generalidad Valenciana en el que la explotación del tramo Aeropuerto-Valencia pasaría a asumirse por Ferrocarriles de la Generalidad Valenciana en sustitución de la línea C-4, y a su vez el metro daría servicio a Ribarroja del Turia y a Villamarchante.
Debido a dicho acuerdo el apeadero dejó de prestar servicio en 2005, fecha en que se desmanteló gran parte de línea C-4.
La estación formaba parta de la zona tarifaria B hasta 2012, cuando FGV decidió cambiarla a la zona C, aumentando considerablemente el precio del billete.