Las instalaciones, que estuvieron operativas entre 1895 y 1985, formaban parte de la línea Valladolid-Ariza.
La estación entró en servicio en 1895, junto al ferrocarril Valladolid-Ariza, construido por la compañía MZA.
[2] Su posición estratégica también le confirió un importante tráfico de pasajeros y mercancías.
Bajo la nueva compañía las instalaciones continuaron teniendo cierta importancia, si bien en 1965 el Depósito fue reclasicado como reserva de locomotoras.
Con la progresiva desaparición de la tracción vapor RENFE concentró en esta estación el material más viejo para desguace, llegando a acumularse un gran número de material durante años.