Está diseñada en bóveda elíptica revestida completamente de los clásicos azulejos blancos aunque en este caso son planos, sin biselar.
La iluminación es de estilo Ouï-dire realizándose a través de estructuras que recorren los andenes sujetados por elementos curvados que proyectan una luz difusa en varias direcciones.
Por último, también de estilo ouï-dire combinando asientos convencionales con bancos que por su altura sólo permiten apoyarse.
El terminal de la línea 2 forma un bucle que contiene numerosas zonas de garaje y que se encuentra bajo la plaza, ubicándose la estación en el centro del bucle.
En la parte superior, las vigas metálicas que sujetan la estructura quedan totalmente a la vista.
Aunque recupera el diseño en bóveda, los azulejos planos que únicamente cubren parte de las paredes, lucen un atípico color marrón en varios tonos.
Está diseñada en bóveda elíptica revestida completamente de los clásicos azulejos blancos biselados.
Su iluminación ha sido renovada empleando el modelo vagues (olas) con estructuras casi adheridas a la bóveda que sobrevuelan ambos andenes proyectando la luz en varias direcciones.