Los pueblos celtas se habían asentado en la península de Bretaña posiblemente en el siglo VI a. C., teniendo ésta importancia estratégica debido a que su dominio permitía controlar la costa atlántica de la Galia y el canal de la Mancha, algo de gran interés para César, que después realizaría campañas en Britania.
[1] El nombre de «esuvios» derivaría del dios epónimo Esus, venerado localmente por las tribus celtas.
Los esuvios serían los que quedarían más al norte de Armórica, pasada la península de Cotentin, en la región que actualmente es Calvados.
En el libro III, que narra las campañas contra los vénetos y otros pueblos armoricanos, además del sometimiento de Aquitania por Publio Craso (año 56 a. C.) menciona que, como faltaba trigo en el territorio de los andes, reclamó provisiones a los pueblos vecinos, entre ellos a los esuvios, a donde envió a Tito Terrasidio (cap.
Nuevamente faltó trigo, esta vez por sequía, en un momento relatado del libro V (años 54-53 a. C.), y esta vez lo que se hace es repartir los campamentos de invierno de las legiones entre los distintos pueblos; al territorio de los esuvios fue Lucio Roscio Fabato con una legión (cap.