[2] Otras ideas sobre la causa de este enfriamiento están conectadas a los cambios en la circulación oceánica y atmosférica.
Un ejemplo de estas extinciones está indicado por la incidencia observada en las especies Varanidae, Chamaeleonidae Cordylidae, Tomistominae, Alligatoridae, y las tortugas gigantes durante el Óptimo climático del Mioceno (entre 18 a 16 Ma) en Europa central (paleolatitud 45-42°N).
[5] Otro indicador que conduciría a las extinciones es la estimación conservadora de que las temperaturas en la región antártica pueden haberse enfriado en al menos 8 °C en los meses de verano en 14 Ma.
[6] Este enfriamiento antártico, junto con los cambios significativos en los gradientes de temperatura en Europa Central, como lo indica el estudio de Madelaine Bohme sobre vertebrados ectotérmicos, proporciona pruebas de que la vida vegetal y animal necesitaba migrar o adaptarse para poder sobrevivir.
Aún no se sabe si esta periodicidad potencial es causada por un conjunto de ciclos recurrentes o por un factor biológico.