El fantasma de Cock Lane fue una supuesta manifestación fantasmal que atrajo la atención del público en Inglaterra en 1762.
Los responsables fueron encontrados y encarcelados; Richard Parsons fue sentenciado a dos años de prisión.
El escritor satírico ilustrado, William Hogarth, se refirió al fantasma en dos de sus pinturas.
Se mudaron hacia Stoke Ferry donde Kent tenía una posada y más tarde, una oficina de correos local.
Poco tiempo después comenzaron una relación, pero la ley de la iglesia impedía que pudieran contraer matrimonio.
[4] Atendiendo las oraciones temprano en la mañana en la iglesia de San Pablo, Richard Parsons conoció a William Kent y Fanny.
[4] Aunque Richard era comúnmente considerado respetable, en su vecindario era conocido como un alcohólico que tenía problemas para mantener a su familia.
Aterrado, regresó a casa donde Parsons después lo visitó afirmando haber visto también al fantasma.
El doctor le diagnosticó que se encontraba en las primeras fases de una fiebre eruptiva, y concluyó junto con Kent que el alojamiento era inadecuado para alguien con un estado crítico de embarazo, mudándose esta vez a “Bartlet's Court”.
Al oír eso, Fanny buscó un abogado para asegurarse que todo estaba arreglado y Kent heredaría su finca.
(3 guineas seguían sin ser reembolsadas), por lo que Kent le dio instrucciones a su abogado para proceder una demanda.
Usando este sistema, el fantasma aparentaba acusar que su muerte se debía a un asesinato.
La toxina mortal presuntamente había sido administrada por Kent dos horas antes del fallecimiento de Fanny y ahora, supuestamente, su fantasma buscaba justicia.
La historia se esparció por todo Londres y el “The public Ledger”, periódico de aquella época, comenzó a publicar detalles acerca del fenómeno y Kent fue puesto como sospechoso de asesinato.
[18] Días después, Elizabeth regresó a Cock Lane, donde se realizó otra sesión de espiritismo.
[21] En la temporada en la que William y Fanny vivieron en Cock Lane contrataron a una criada llamada Esther “Carrots” Carslisle (Carrots significa zanahoria en español y fue apodada así debido a su cabello pelirrojo).
Frazer comenzó con su introducción habitual antes de que Moore lo mandara afuera, aparentemente por su irritado comportamiento.
Entre todos los que se encontraban en la sesión, se encontraba un hombre “extremadamente deseoso de detectar el fraude y descubrir la verdad del asunto” que después mandó su versión de la historia al “London Chronicle”.
El caballero le preguntó al señor Parsons si permitiría que su hija fuera trasladada a un cuarto de su casa, pero este se negó.
Parsons había hablado con sus amigos y aparentemente estaba preocupado de que Kent estuviera ocupado haciendo sus propias averiguaciones.
[nb 3] En su lugar, Parsons permitió que Elizabeth fuera trasladada al hospital de San Bartholomew, donde otra sesión espiritista se llevó a cabo.
Nada fue reportado hasta las 6 de la mañana, donde tres rasguños fueron escuchados, aparentemente cuando Elizabeth se encontraba dormida.
Con ayuda del señor Dartmouth se comenzaron a juntar las piezas acerca de quiénes estaban involucrados en su investigación.
La corte estaba llena de espectadores que miraban cómo Kent daba evidencia hacia el jurado.
[7] James Frazen estaba a un lado del estrado, su historia corroborada por la criada Esther "Carrots" Carlisle, quien testificó ese día.
El magistrado inglés y reformador social John Fielding, quien era ciego, es dibujado en la parte izquierda diciendo "me gustaría ver al espíritu".
Un hombre de grandes botas, látigo en mano, dice: “Ay Tom, estaré acostado más noches que en la coronación"[nb 5] y su compañía remarcaba “cómo ellos se tragaban los rumores”.
[nb 6] Otro clérigo exclamaba: “si, el reloj de oro suena tres veces” y un cura le pide “no molestarlo”.
[51][54] Hogarth hizo sus propias observaciones sobre el fantasma de Cock Lane, con obvias referencias a la “credulidad, superstición y fanatismo” (1762).
[59] Dickens también menciona brevemente al fantasma en su libro “historia de dos ciudades”[60] y en Dombey e hijo.