[2] Los antecedentes de la Farmacopea Mexicana se remotan a la época colonial.
[3] En 1552, Martín de la Cruz escribió en náhuatl sobre las hierbas medicinales: Libellus de medicinalibus indorum herbis, escrito y traducido al latín y en donde se reúne a los principales medicamentos utilizados por los indígenas, incluyendo la preparación, indicaciones y usos.
El Supremo Gobierno, presentó oficialmente la tercera edición para el Distrito Federal, Tepic y Baja California en 1896.
Dos ediciones posteriores, la tercera se publicó en 1962 y la cuarta en 1974.
Posteriormente en 2004 se publica la octava edición y en el 2006 se publicó por primera vez el Suplemento para dispositivos médicos, con esta publicación se posiciona como una de las Farmacopeas más completas a nivel mundial, abarcando controles de calidad para los medicamentos alopáticos, homeopáticos, herbolarios, dispositivos médicos y controles de calidad para los establecimientos como son las farmacias.