Llegó al Perú el 1 de abril de 1862 al aceptar un puesto en la casa comercial de un tío en el puerto peruano del Callao, donde la familia Piaggio tenía contacto desde hacía más de un siglo en su gestión comercial.
Piaggio era proveniente de una conocida familia de armadores genoveses, y su migración se hizo necesaria cuando la familia sufrió cuantiosas perdidas en su flota mercante durante un acto de guerra.
La explotación petrolera de la empresa de Piaggio duró desde el año 1879 hasta 1934, año en que fue expropiada por el Gobierno Peruano y sobre cuyos yacimientos e instalaciones se creó lo que acabó siendo Petroperú.
Fue reconocido por el gobierno del Perú como un héroe de guerra durante la Guerra del Pacífico, confiriéndole la medalla como Benemérito de la Patria.
También se desempeñó en bienes raíces con la Compañía Inmobiliaria La Legua, que creó la zona industrial del puerto del Callao.