Los bancos e instituciones depositarias de los Estados Unidos están obligados, por ley, a mantener ciertos niveles de reserva, ya sea como saldo en la Fed, o como efectivo en una bóveda.
Por ejemplo, suponga que un banco estadounidense, en el curso normal de su negocio, emite un préstamo.
La tasa nominal es la que se propone alcanzar la Fed, la cual modifican mediante operaciones de mercado abierto.
Los préstamos interbancarios son una forma rápida en que los bancos pueden aumentar su capital.
La tasa de fondos federales y LIBOR tienen los mismos objetivos, pero son distintas en los siguientes aspectos: