En 1913 fue hecho prisionero y llevado de leva al norte.
En el primer ataque contra los villistas, Polanco se pasó al lado rebelde, integrándose así a las fuerzas de la División del Norte.
Operó bajo las órdenes de Maclovio Herrera, con quien llegó a teniente coronel.
Más tarde se incorporó a las fuerzas zapatistas y actuó bajo las órdenes de los generales Diego Ruiz y Amador Salazar.
En 1920, al triunfo del movimiento de Agua Prieta, se incorporó al Ejército Mexicano en la división comandada por Genovevo de la O.