Felipe Ignacio Canga-Argüelles y Pérez de la Sala

fue un ilustrado español que ostentó diferentes cargos en la administración del Estado,[1]​ entre ellos el de consejero del Consejo Real de Castilla.

[2]​ Fue el padre, abuelo y bisabuelo de una estirpe de políticos españoles como José Canga-Argüelles, Felipe Ignacio Canga-Argüelles Ventades y José Canga-Argüelles y Villalba.

Desempeñó varios cargos en su labor de abogado y como docente universitario.

Fundó la Academia de Le­yes y Cánones para fomentar el debate sobre las leyes españolas de la época.

Aquella academia fue el punto de partida del Colegio de Abogados y en ella se abordaban temas que no estaban presentes en los estudios oficiales.