Es cofundador de la revista venezolana «Cultura» y ahí se da conocer como poeta esto sucede en 1912.
En esta oportunidad logra preparar los originales de su primer poemario, el cual tituló «Canciones del convaleciente», pero nunca llegó a editar.
Ejerció la docencia desde 1922 hasta 1936 en el Instituto San Pablo y en la Escuela Normal Miguel Antonio Caro.
Luego en Londres, como primer secretario y consejero, padece los bombardeos de la aviación alemana durante la Segunda Guerra Mundial.
En 1959 se retira del servicio exterior y vive de forma definitiva en Caracas.