La imprenta fundada por Cansoles estuvo en funcionamiento hasta finales del siglo XVI aunque, después de su muerte, que tuvo lugar en 1585, estuvo gobernada hasta principios del siglo XVII por sus hijas y herederas.
El establecimiento, regentado por sus hijas solteras, decayó rápidamente a falta de una buena dirección.
Su incapacidad e inexperiencia para llevar el negocio familiar motivaron las frecuentes protestas de los estudiantes y del vicario general.
A finales del siglo XVI ya no existen noticias de la imprenta Cansoles.
Al parecer su principal producción fueron los pliegos sueltos, impresos, por otra parte, mucho más expuestos a su desaparición con el paso del tiempo.