A los mudéjares, tras la toma de la Vera vieja, se les concede que vivan en Antas (por su necesaria distancia al peligroso mar), la que fundan y en la que comienzan a planificar un enclave con un sofisticado sistema de riego, aprovechando cada litro de agua para sacar el máximo rendimiento a la tierra y poder pagar así los impuestos que los cristianos viejos les exigían.
El 25 de septiembre (día de san Cleofás) los dos ejércitos comienzan a guerrear con la técnica del escaramuceo y dos jinetes consiguen burlar el cerco y dirigirse a Lorca para solicitar su ayuda: Martín Gómez Garrido y Francisco Soler Campoy.
Ante la inminente llegada de los lorquinos los moriscos huyen hacia Cuevas del Almanzora, levantándose así el asedio a la ciudad, y celebrándose unas fiestas, quedando así fijado el patrón de Vera.
[3] Principalmente se realizan actividades deportivas, juegos infantiles, conciertos y espectáculos de humor.
El recinto ferial del Palmeral acoge la feria donde se ponen atracciones y puestos de comida.