Sus esculturas han sido realizadas la mayoría para exponerse al aire libre y con su monumentalidad identificarse con los paisajes que las rodean.
En la escultura europea la figura reclinada era una forma adoptada por los escultores desde una tradición clásica, donde se representaba con un carácter de sensualidad, belleza ideal y con un elevado erotismo.
En la figura de Chac Mool, la interpretación es diferente, los ritmos siguen una línea sencilla, la cabeza se encuentra girada hacia el frente, mientras el cuerpo está en posición longitudinal, según el mismo Moore: «vuelta hacia arriba, al cielo y las piernas descendiendo como columnas».
Supo integrar en sus «figuras reclinadas» la combinación de las obras Mayas con las disposiciones clásicas del cuerpo que reposa sobre un lado con el brazo levantado, consiguió con todo ello unas esculturas donde la energía se hace más intensa y consigue un rico juego entre el naturalismo y la abstracción.
[5] En 1925 Henry Moore, escribió una nota sobre la técnica de las obras prehispánicas: Durante los años 1930 la estilización en sus figuras es mucho más evidente y también el paso hacia la abstracción, es cuando empieza a perforar el volumen.