[2] San Jerónimo se refiere incorrectamente a Filón como el maestro de Carnéades.
[3] Diógenes Laercio menciona a un Filón (presumiblemente diferente) que fue un discípulo de Pirrón.
[5] Por otro lado, su maestro Diodoro, en la misma época, no aceptaba más que la condición en el sentido de implicación.
En el siglo XIX Frege, Peirce, Russell y en general los lógicos matemáticos, aceptaron el sentido de Filón.
La condición formal (la condicional), en cambio, únicamente muestra “lo que ocurriría o podría ocurrir si una proposición falsa fuera verdadera”, lo que abre esta problemática a la cuestión de la «modalidad», (necesidad-contingencia, posibilidad-imposibilidad).