[1] El instructor debe poseer habilidades de facilitación y enseñanza, utilizando diferentes estrategias para involucrar a los estudiantes y abarcar diferentes estilos de aprendizaje, así como habilidades para utilizar e integrar las nuevas tecnologías en la enseñanza.
Independientemente del formato, el aspecto más importante es que los alumnos tienen acceso en tiempo real al instructor para recibir comentarios y entablar discusiones.
[4] Es también el método más usado para la formación empresarial ampliada, que forma a clientes y socios, con una tasa de uso del 80%.
[3] Debido a la gran evolución que ha existido en los últimos años de la tecnología educativa, han surgido muchas tendencias relacionadas con la formación dirigida por un instructor que han provocado su mejora, modernización y actualización para seguir estando vigente.
En este caso, una parte de la formación se lleva a cabo en directo, mientras que la otra parte se lleva a cabo en línea y sirve tanto para ampliar lo dado en clase como de repaso entre sesiones.