Todo esto sugiere que Abjasia en este período era una parte orgánica, aunque periférica, del mundo cultural romano antiguo.
Cien años después de su fundación, Sebastopolis se convierte en un importante centro comercial; así lo indican los hallazgos arqueológicos, los restos de edificios residenciales, públicos y culturales encontrados en su territorio.
Posteriormente, la vida en Sebastopolis se desvanece gradualmente, y al final del siglo V, la ciudad perdió toda su importancia anterior.
Posteriormente, en el periodo entre los siglos XI-XV, las murallas sufrieron cambios y se reconstruyeron.
En 1858, bajo el mando del sultán Murad V, los otomanos reconstruyeron la fortaleza de Sujumi y la convirtieron en su base militar, como lo demuestra la inscripción tallada sobre la puerta.
Durante la revolución rusa de 1905. los bolcheviques Sergó Ordzhonikidze y otros buscaron refugio en la fortaleza.