Fue diseñado por Chris Radage y Riccardo de Marco.
Lo conducían Luca Badoer y Andrea Montermini, ambos en su primer año con el equipo.
Presentado en Imola, supuso un gran paso adelante en términos de carga aerodinámica.
El equipo quedó último en el Campeonato de Constructores, sin puntos.
Antes del Gran Premio de España, Shannon Racing se hizo cargo del equipo con una nueva decoración verde y blanca.