Francesco von Mendelssohn

Tras el fallecimiento de su padre en 1917; su hermana Eleonora von Mendelssohn se casó en 1919 con el pianista suizo Edwin Fischer y su madre regresó a Italia junto a su hermana pequeña, Angélica von Mendelssohn.

Francesco decidió permanecer en Berlín y estableció su residencia en la villa familiar de Grunewald.

Allí organizaba fiestas que eran famosas en toda la ciudad y que frecuentaban amigos como Yvette Guilbert, Artur Schnabel, Vladimir Horowitz, Gustaf Gründgens, Wilhelm Furtwängler, Paul Wegener, Fritz Kortner y Elisabeth Bergner.

[2]​ Francesco von Mendelssohn no tenía la perspicacia empresarial de su familia, pero se sintió muy comprometido con su tradición cultural.

Contratado por una orquesta provinciana de Texas durante los años cuarenta, se marchó tras sólo dos temporadas y media.

Después de permanecer apátrida durante muchos años, Francesco intentó sin éxito obtener la nacionalidad estadounidense.

Fue detenido en repetidas ocasiones por homosexualidad y embriaguez e ingresado en un psiquiátrico, donde fue sometido incluos a "terapia" de electrochoque.

Francesco von Mendelssohn tenía un historial de melancolía anterior a su emigración.

[9]​ Francesco fue ingresado en la División Westchester del Hospital Presbiteriano de Nueva York, en White Plains.

Jakob Goldschmidt, su abogado, no pagaba las deudas y presionaba a todo el mundo diciendo que mantenerle en aquel sanatorio costaba mucho dinero y que si seguía allí mucho tiempo acabaría dilapidando el dinero del su fideicomiso.