Se especializó en fisiología vegetal y realizó investigaciones sobre bioproductividad agrícola.
Desde 1972 comenzó su actividad como docente, impartió cursos en diversas instituciones y centros educativos.
Sus aportaciones del uso de salicilatos para incrementar la productividad en el sector agrícola son reconocidas internacionalmente y aplicadas por empresas trasnacionales.
En 1970 y hasta 1998 se integra al Colegio de Postgraduados como profesor investigador donde impulsa el postgrado en Fisiología Vegetal.
Publicó la Historia de la Fisiología Vegetal en México (Ciencia 1987) y cuenta con estudios referentes a control hormonal en plantas, del agua en plantas y bioproductividad.