[2] Miembro de la "Renaixença" cultivó múltiples campos entre ellos activista social y formación en humanidades, puesto que inició sus estudios con el padre Fidel Fita.
Durante la segunda mitad del año 1899, Francesc Mestre y Noè es nombrado Archivero Honorario de la ciudad.
Él mismo bocado explica el porqué: “...lo mío ruego lo apuntaba como urgente y necesario, por la razón que la expoliación de las tierras alligallades se detentaven por la creencia de los propietarios usurpadores que se había perdido lo “Libro del Pastorcillo”.
Pero cuando el 1915 los mencionados planos todavía no están terminados, Mestre y Noè mujer a conocer la anchura y los antecedentes para facilitar su restauración, basándose con las notas que tomó el 1904 en lo suyo viaje a Cantavella.
Este conflicto, más tarde, será bautizado por la historia como Guerra de los Segadores.
Si bien ruedan los siglos la historia no os olvida, Los vuestros hechos heroicos serán siempre inmortales, Disteis por la patria el corazón, el aliento, la vida, Vosotros sois los únicos que habéis cerrado la herida Que abrieron en Tortosa perdidos hijos desleales.
Detrás la codicia, buscando honras extrañas Dejaron las de casa soberbios aduladores, Hombres sin fe ni patria, sin corazón, pasión, ni entrañas, Besaban manos odiosas cegados en sus hazañas Por el brillo del oro que encisa herencia de traidores!
Ante esta convicción, Mestre y Noè, involucra a numerosas personalidades en la defensa del verdadero escudo de Tortosa.
También se ve involucrado el abogado e historiador Mariano Galindo y García(Calaceit, 1873-Tortosa, 1917).
A pesar de que es siete años más grande que Galindo, Mestre tendrá mucha amistad, puesto que Galindo tiene un gran interés por la historia y la pintura, además de afición al estudio y a la escritura, lo cual lo hará abandonar incluso su carrera de abogado para dedicarse íntegramente.
El mismo Maestro dice: “Galindo era un íntimo amigo mío, casi inseparable, y a mi lado sintió las primeras aficiones históricas que después cultivó con admiración de todos”.
[8] Cuando el 1899 Maestro y Noè inicia su tarea al archivo de la ciudad de Tortosa, Galindo tiene acceso, gracias a su amigo, a fondo y contenidos históricos que acentúan su vocación historicista.
Su obra capital, “La Revolución de Tortosa del año 1640” demostraba que en Tortosa también hubo mártires a favor de Cataluña, y animado por Mestre, la obra es la primera que escribe en catalán.
A los pocos días me leyó a la Costa de Curas las nuevas cuartillas compuestas en lengua catalana, confesándome que el uso del idioma propio da más fuerza al escritor, El único argumento que él ponía en contra de mi deseo era la barrejadissa aragonesa que se observaba en lo léxico calaceità, pero esto fue fácil de arreglar y pasó adelante en su empresa”[9] A puertas de la muerte, encargaba a Mestre que conservara y editara su obra “La guerra de Cataluña en Tortosa y sus fronteras”.
A pesar de esto convenía conmigo que lo mantenerse Tortosa, “la Tortosa oficial”, fiel a Felip IV, era debido al anhelo de la nobleza al adquirir honores, y el clero, al obtener prebendas, y cuando no, la tranquilidad, que es lo que siempre ha pretendido en todas las ocasiones difíciles, quitado honroses excepciones, como se ve en las actas capitulars del Archivo de la Catedral”.
Al poco de morir, Mestre le recibe homenaje en un artículo bibliográfico publicado a la Zuda.
Mestre finalmente consiguió el 1934, que el Ayuntamiento tortosí renunciara a los títulos de “fidelíssima y ejemplar”, renuncia que iba ligada a la modificación del escudo.
El estudio no llegó a ser publicado todo y su existencia.